La comunicación, empatía y pensamiento crítico son el centro de las POWER SKILLS, esto se suma a la eficiencia que se busca mediante la correcta gestión, la toma de decisiones y, en general, la profesionalidad. Es necesario situar a las personas en el centro de las transformaciones y los procesos, creando entornos responsables y sostenibles y cubriendo todas las áreas de desarrollo que movilizan a las organizaciones.
Diversas encuestas relacionadas con habilidades más importantes a desarrollar en el mundo del trabajo explican que las Power Skill tienden a ser de naturaleza social y emocional: por ejemplo, empatía, liderazgo y adaptabilidad. Pero, independientemente de las habilidades involucradas, también descubren que existe una receta clara para el éxito en la transformación de las mismas. Así, determinan los esfuerzos programáticos necesarios a gran escala para apoyar el desarrollo de habilidades de modo que los colaboradores puedan bien adaptarse a los requisitos cambiantes en su función actual a nivel fundamental, o pasar a una nueva.